El mantenimiento de tu Hyundai incluye una serie de servicios y revisiones periódicas que garantizan el correcto funcionamiento y la prolongación de la vida útil de tu vehículo.
En primer lugar, el mantenimiento incluye el cambio de aceite y filtro de aceite, lo cual es fundamental para mantener el motor en buen estado y evitar problemas de lubricación. Además, se realiza la revisión y ajuste de los niveles de líquido de frenos, líquido refrigerante y líquido de dirección, para asegurar un correcto funcionamiento de los sistemas de frenado y dirección.
También se realiza la inspección de los neumáticos y su rotación, lo cual ayuda a prolongar su vida útil y asegurar un correcto desempeño del vehículo. Se verifica la presión de los neumáticos, se revisa el desgaste de la banda de rodamiento y se realiza la rotación de los neumáticos delanteros y traseros para garantizar un desgaste uniforme en todas las ruedas.
Otro aspecto importante del mantenimiento Hyundai es la revisión de los sistemas de frenos y suspensión. Se inspeccionan los discos y las pastillas de freno, se verifica el estado de los amortiguadores y se ajusta la alineación de las ruedas para asegurar un correcto funcionamiento de los sistemas de seguridad y confort.
Además, se realiza la revisión y limpieza del sistema de aire acondicionado y calefacción, para garantizar un ambiente agradable y saludable dentro del vehículo. Se verifica el funcionamiento de los filtros y se limpian los conductos de aire para evitar malos olores y la acumulación de bacterias y hongos.
Por último, el mantenimiento incluye una revisión completa del sistema eléctrico y se realizan pruebas de diagnóstico para detectar posibles fallas o malfuncionamientos. Se verifican los fusibles y las luces del vehículo, así como también se revisa la batería y el sistema de carga y arranque.
En resumen, el mantenimiento Hyundai abarca una amplia gama de servicios y revisiones periódicas que aseguran un correcto funcionamiento y un óptimo rendimiento de tu vehículo a lo largo del tiempo.